Las bolas

Escuche la locucion

La apuesta consistía en cubrir la distancia concertada en menos lanzamientos. En Lagata el camino elegido para tirar la bola era desde Santa Bárbara hacia el balsete, camino arriba. Normalmente el peso de la bola oscilaba entre los dos y cinco kilos, siendo antiguamente balas de cañón de hierro y plomo, y a partir del siglo XIX bolas realizadas por los herreros.
Se jugaba “mano a mano” si eran dos los contrincantes o bien por equipos, siempre alternando sus tiros.

Por parejas: lanzaba la bola uno de cada equipo, una vez lanzadas todas se volvía a tirar desde donde había llegado la bola de su equipo, así hasta tres veces. El equipo que llegaba más lejos era el ganador.

Individual: cada jugador lanzaba y era ganador el que más lejos la había enviado.
Debido a que en el tiro por parejas, era complicado medir los lanzamientos, se empezó a sumar los pasos (unidad de medida) de cada equipo, lanzando todos ellos desde el inicio.

El tiro se hacía tomando carrerilla detrás de la raya de salida y medido desde el punto de tirada hasta el punto de parada desde el cual se hacía el tiro siguiente.


GRACIA VICIÉN, Luis, Juegos Aragoneses: historia y tradiciones, Zaragoza, Mira Editores S.A., 2001.